Hoy 16 de febrero está cumpliendo años, PABLO CUADRADO, el profesor de educación física, que por el solo hecho de hacer, estuvo en las voces de algunos, aunque quedará siempre en el recuerdo marcado en grandes logros.

La vida de Pablo, siempre ha sido una vía escape entre lo que ama hacer y el deber hacer, claramente tuvo etapas marcadas en donde dejaba su Pozo del Molle y alternaba experiencias lejos de su familia, de los negocios familiares, ya que quería sentir esa adrenalina de al menos un tiempo poder disfrutar de sus pasiones, el deporte, la preparación física y el acompañamiento a las personas.

Pablo realizó estudios primarios y secundarios, hasta que dejó el pueblo por primera vez cuando viajó a Córdoba para estudiar educación física, más tarde se iría rumbo a Buenos Aires, donde capaz más allá de los trabajos que realizó en centros de rehabilitaciones para deportistas, la mayoría como en mi caso, nos quedamos con las imágenes de ese profesor, o preparador físico al que los jugadores lo iban a buscar para abrazarse en los goles del Deportivo Armenio y podíamos seguir cada fin de semana en TN Deportivo.

De perfil bajo, casi siempre se mantuvo alejado de los medios, en una de las pocas entrevistas que me dio alguna vez, mencionó su historia al regreso de Buenos Aires en Pozo del Molle.  

Pablo -  “Cuando vine a Pozo del Molle empecé a dar clases en el secundario, le daba clases a las mujeres, no terminó de convencerme, al tiempo me llamaron Claudio Scharff y Daniel Aguirre para darme la posibilidad de armar el gimnasio en Fundación, ya que allí no había, les agradezco por que fue mi primer paso. En ese tiempo estaba Andrea Arguello y habíamos llevado mucha gente en poco tiempo, había un lindo ambiente laboral, iban muchos chicos, mucha familia, yo la verdad que trabajé muy tranquilo ahí”.

Pablo – “Yo siempre digo que en Pozo del Molle si hay algo bueno, son las personas que trabajan en las instituciones, trabajé en Fundación, luego en Sportivo y estuve cerca del grupo de básquet de Argentino, es digno de destacar los laburos que hacen, seguramente cuando trabajo en algunos lugares lo hago porque pienso parecido, puedo volver a esos lugares, incluso hasta después de haber pensado distinto o haber tenido algún problema, hoy me mantengo distante del alambrado, porque todos hablan, pero yo vi desde adentro como laburan todos. Yo a veces escuchaba que con el solo hecho de pagar la entrada algunos creían tener la solución de todo, me molestaba que digan que la gente se robaba plata de los clubes, cuando acá yo cobré mi sueldo del bolsillo de los dirigentes locales, que después la reponían a la plata con el tiempo o no”.

“Fue el preparador físico con los títulos del 2007 y 2011 en Sportivo”

Pablo – “Siempre me han dicho que el problema que tengo yo es que me encariño mucho con los jugadores, después a la hora de tomar distancia en las decisiones no las se tomar, sigo pensando que siempre el jugador puede dar un poco más, igualmente quizás sea la razón por la cual tenga muchas amistades del fútbol, en el 2007 el grupo fue espectacular, fue un proceso de jugadores que formaron lo grande que se lograría en el 2011, ese año, me acuerdo que llovía y tenía 35 personas entrenando adentro del salón”.

Pablo - “Lo que recuerdo es haber conseguido un televisor para que en las concentraciones miráramos fútbol, cuando llegué estaban viendo Gran Hermano (dice entre risas), la base de todo resultado es tener grupo, en el 2011 cuando me va a hablar Hugo Farías, le dije si me dejaba meter algunos nombre, amigos míos, se me pegó por eso, pero las estadísticas me terminaron dando la razón. Un día le dije a Hugo, que organizáramos una cena familiar con los jugadores, recuerdo que había como 10 jugadores con sus parejas, para mí fue clave para el armado del grupo”.

Pablo implementó esos años, algo inusual, los jugadores concentran a las 9.30 de la mañana cuando eran locales, habían llevado a la vieja sede de Sportivo, un pool, el televisor, el metegol y hasta videojuegos, se les daba de comer fideo a los 32 jugadores de reserva y primera, algo que niveló para arriba la historia con títulos que ya titulé arriba.

Pablo – “El que mejor labura en inferiores, para mi es el profesor de vóley, Luis Roberti, por los trabajos que le vi hacer, es un referente y lo tenemos acá, todos deberían hacerle consultas”.

Pablo creyó siempre que en Pozo del Molle hay que corregir el trabajo de base en inferiores, más de una vez pronunció que siempre se piensan en técnicos, pero hay que buscar quien desarrolle las capacidades desde niño a los chicos, en cualquier deporte que sea, uno puede darse el lujo de equivocarse con una indicación táctica, pero que si existe una equivocación en el desarrollo de alguna de capacidad desde niño, se hace más daño.

Hoy está cumpliendo los años, sigue siendo respetado por cada uno de los que lo tuvimos como preparador, está dentro de los grupos de los deportistas, es una fuente de consulta constante, sin nada a cambio, los negocios familiares lo alejan a veces, pero no hay nadie, que pueda sentarse a decir, lo hable a Cuadrado y no me dio un consejo sobre deporte o sobre preparación.

¡Feliz cumpleaños profe por muchos más y hasta cuando nos volvamos a encontrar en algún recinto deportivo!