El PRESENTE Y FUTURO DEL FÚTBOL MAYOR EN SUS PIES

Así van pasando meses, ya van 6 exactamente en donde el virus frenó todo tipo de actividades, el fútbol mayor había comenzado en Las Varas ante Granaderos, nadie se hubiese imaginado, ni el más pesimista que estaríamos tanto tiempo sin ver acción, para colmo de males, lejos de pensar en el regreso, parece que estamos viendo el pico de una pandemia mundial que rozó a todos.

El sello está hecho de amigos, de todas las edades, si bien en el último tiempo, allá por agosto del 2017, decidí darme un espacio para mi, practicando fútbol con los más de 30 años, pasé largos años viendo partidos de fútbol infantil los sábados, en estos últimos años no estaba al tanto, si sabía de resultados, goleadores, por intermedio de los grandes amigos que tengo en las comisiones pero no pude estar muy presente en las canchas.

Tengo la suerte de poder contar que trabajé en FM Sueños Las Varillas, invitado por su director Gustavo Pirra, tuve el privilegio de rodearme con los mejores periodistas y compañeros que uno puede tener, Hugo Cagnasso la gran enciclopedia viviente en Las Varas, Rubén Pastore en Fortín otro estadista, organizador, José Ricardo Mana “lobo”, un tipo que lo escuchaba por radio en la década del 90, Hugo Brunetto desde Carrilobo que aun continua con un gran proyecto como es “Carrilobo Informa”, Mauricio Arévalo en Saturnino María Laspiur, Diego Ferreyra y Diego Mautino con mucho trabajo en Alicia, en gran parte de mi aprendizaje, Ramón Alcántara desde El Arañado, por citarle algunos de tantos. Los sábados eran las 13 horas y ya estaba en cancha de Fundación para informar el resultado del primer partido, pero como pasaban tan rápido, desde allá nos pedían árbitros, goles, rojas, todo, prácticamente nos veíamos los 5 partidos completos de las categorías inferiores.

A lo que quiero llegar para contarles, es que el otro día, recibí un mensaje de Aníbal Mansilla “el flaco”, quién respetuosamente como lo hace conmigo desde que nos cruzamos en la cancha, yo como periodista y él como jugador, me dice ¿para cuándo una nota de la 2000?, leo el mensaje y le contesté  “tenes razón, que pedazo de categoría”.

En Pozo del Molle hubo y habrá categorías espectaculares, apenas con 5 años tengo recuerdos de la 74 siendo campeona de cuarta categoría en Huracán con gol de Mauro Pochettino, luego mis recuerdos me llevan a la 78 de Emilio Russi, Federico “Pepona” Venturi por citarles algunos. Y más acá en el tiempo si bien hubo muchas buenas, respeto a todas, vi campeonar a varios, aunque tengo dos categorías que se robaron mi atención especial, una es la 95 de la cual hablaré quizás más adelante, la otra, la última que pude disfrutar como periodista, es la clase 2000.

En el año 2000, cuando estos pibes nacían, Pozo del Molle tenía un par de cambios, eran las épocas de Mr. Drake, el primer boliche en calle Avellaneda, se dejaba atrás el de dos pisos, ese año Sportivo Social se llamó el fútbol de primera y luego desaparecería por 6 años, a nivel nacional Rodrigo sacaba el famoso álbum “A 2000”, quizás nosotros podríamos decir lo mismo unos años después, los pibes de la categoría realmente iban a 2000.

Estos pibes ingresan, la mayoría  del grupo de jugadores, a la escuelita, justo traigo esto a colación, porque Vicario, Bringas y el profesor Gabriel Pérez de Villa María principalmente, era el que recibió y moldeó a esta generación dorada, en el 2006 mientras se ganaba la copa Challenguer, la categoría 2000 encendía la llama que es presente y futuro del fútbol de nuestra localidad.

En cuanto al equipo recuerdo ver en el arco alternando, aunque puedo equivocarme a Román Diaz, Leonel Denis, Tomás Scharff, que de chiquito pasaba al frente nuestro, donde yo estaba con su papá Claudio, le preguntábamos quien era su ídolo y decía Sergio Comba, el ex arquero de Sportivo. Después en la defensa, generalmente, estaba el “heredero” Nachito Sanmartino, un central que además de ser tiempista, lee bien el juego, sabe cuando rifar pero sabe salir de atrás,  Juan Aragno y Lautaro “Monito” Cisnero por las bandas, los mellizos Pereyra, Aarón en defensa y manejando los hilos a la perfección Luciano, el eje del mediocampo, por los costados lo solía ver al melli Agustín, que de pibe me hacia acordar mucho al “Osito” Albornoz cuando lo veía en la 95, por izquierda “Masche”, Agustín Navarro, hacia lo que quería, mientras que arriba te esperaban dos animales del gol, uno por olfato y ubicación, Tomi Panero, el otro, por empuje, garra, perseverancia, Joaquín Caro.

No tengo dudas de que fue y es una tremenda categoría, Aníbal tiene razón que merecen notas, estos chicos fueron campeones de la liga San Francisco en la categoría promocional, preinfantil y juvenil, además quedaron ahí no más en la puerta, en la infantil y Prejuvenil, donde se consagraron subcampeones, tremendos lauros. Debemos  sumarle que en el año 2018, jugaron la categoría 2000 pura, la liga Villa Maria y se consagraron campeones de 4º división, siempre de visitante.

No quiero olvidarme de otros más, pido perdón si pasa eso, pero recuerdo a Nicolás Ghidetti, Nacho Picco, Pancho Báez, Cori Pavón en su llegada a Pozo del Molle, Juan Pablo Celada, Juanqui López, chicos que se cruzaban con los 99 y hacían buenas temporadas, por citarles con Agustín Pochettino, Valentín Lione, Bruno Ojeda el arquero, en la 2001 se mezclaban con Lautaro Alberto, Leo Denis que lo nombré arriba, Lucas Salvador, mi amigo Valentín Turaglio que ya demostró en primera división que tiene potencial.

Es tan grande esta categoría, que cuando Sportivo vuelve al fútbol en el 2011, luego de 18 años sin presentar categorías, se midieron estos pibes en auténticos partidazos, Fundación era una potencia, pero Sportivo repatrió a Román Díaz, Juampi Celada, Juanqui López, lo tenía a Samuel Martínez, Mati Fleytas, el “cosito” Reynoso, el tapado que trajo Fulgenzi y Tito Báez en aquellos años desde San Francisco, que hermosos partidos de futbol.

Hoy no hay fútbol por el virus, pero la base del futuro está en estos pibes, ya con 20 años, más los mayores que tienen vigencia, la camada del “95” que anda dando vueltas por la zona, los referentes, ojala algún día los podamos unir con los experimentados que quedaron, no tengo duda, que junto a la generación dorada, el proyecto tendría alguna alegría. Solo basta con saber que el año pasado, toda esta categoría, fue la base, de un subcampeonato en la liga San Francisco, con la reserva.

Así se va otra historia, gracias Aníbal, sin dudas, la 2000, se la merecía.