Es cierto que Ulises Bueno y los chicos de “Q Lokura” estuvieron por la zona con anterioridad, en otra etapa de la pandemia, las mesas y las sillas fueron las protagonistas de esos show llamados “en burbujas” o formato “bar”, algo inusual e inédito. En nuestros alrededores, el Teatro Verdi de Villa María se animó a apuestas de este tipo, el comedor de la terminal de ómnibus de Las Varillas, de igual manera, pero todos con un protocolo de show más bien íntimo o acústico de grandes artistas.

Fue recién en el final del mes de septiembre en donde veíamos que se venía el baile a nuestras vidas otra vez, el punto de quiebre fue Damián Córdoba en el festejo patronal de Villa María, un domingo por la noche, unos días después “Dale que va” llegó a Sacanta y quedaba demostrado que los bailes estaban de regreso, ya las mesas y las sillas eran un recuerdo de un época de lucha de este sector que vivió golpeado económica y sentimentalmente hablando durante 18 largos meses.

Ya nada es igual, pero lo que no cambió y nunca cambiará es el aspecto del fenómeno social igualitario que tiene el baile del cuarteto, una procesión en donde al igual que ante los ojos de Dios, allí no importa absolutamente nada de lo material que obtengas, ahí adentro y en esas horas, si decidiste ingresar, no importa cuánto tengas en tu billetera, no importa cuanta edad tengas, no importa donde transcurre tu vida, en ese momento, estás en igualdad de condiciones que todos los que están a la par.

En pandemia, muchos grupos tuvieron que reacomodar sus piezas, “Banda XXI” ya no tiene a Santiago Dadone como cantante, se despidió y ya estuvo en Pozo del Molle en dos oportunidades como solita cantando en “Wanna Bar”. El Tano Romero actuó en el mismo lugar este fin de semana largo, mientras que en la zona ya empezaron a pasar numerosos artistas.

El mismo día que estuvo “La Konga” en el “ACO” de Las Varillas, “Jean Carlos” estuvo en la terminal de esa ciudad, antes habían pasado Ale Ceberio, el Negro Videla, Pelusa, entre tantos de grandes trayectorias, de hecho el famoso local de la esquina céntrica varillense, tuvo a los chicos de “La Manía”, todo en la misma noche.

La noche del jueves 7 de octubre, a algunos los puso en la dualidad de elegir a la banda de mayor convocatoria pre pandemia, “Q Lokura” que volvió a “Mundo Rojo” en Villa María o a una banda que se reinventó en tiempos de pandemia como la “La Konga” que colocó algunos covers en redes sociales que se viralizaron y se metieron de lleno en el imaginario colectivo. En Villa María en un día colocaron el cartel de localidades agotadas, ”La Konga” no se quedó atrás, con un Pozo del Molle que claramente respondió en gran cantidad de entradas para este evento.

Magali Olave estuvo en el centro cívico de Pozo del Molle, ante la atenta mirada de Matias Suarez (futbolista de River Plate), ya también despertando a este pueblo necesitado de alegrías. La gente visiblemente estuvo muy golpeada y estaba buscando distracciones desde el inicio de la primavera.

Yendo al show de “La Konga”, la banda volvió al lugar que mejor le sentó en la zona, para aquellos que pasamos la década de los 30, no hubo mejor frase que ejemplifique este regreso que la de “AV NOVA TE AMO”, dijo Nelson Aguirre, es que el abanderado de este grupo sabe que todo el romance comenzó allí. Es que aquel boliche ubicado en el actual “Roof”, tenía a Pablito Beltrán de DJ, “Cochi” Schibli de iluminador y Matías Rodríguez como animador, Nelson mantiene aun amistad con David Enría “la galga” un histórico remador de las noches varillenses.

Allá por el 2003 aparecieron tímidamente pero arriba del escenario contagiaban mucha alegría, los primeros temas que se despegaron fueron “estrellita y duendes”, “hay otra en tu lugar”, “te amo”, covers que estaban muy bien logrados, en ese inicio Nelson estaba acompañado por Ale Dempke y Juan Arguello (el pelado tenía toda la energía y era el encargado de los temas de agite). Era tanto el éxito que tenía en La Varillas que venían cada tres meses y cualquier feriado era la mejor excusa, de hecho incluso hasta en esa época le discutieron la gente y se le animaban a hacerle frente a los bailes de Carrilobo. Ya meses después la disco regalaba cd grabados de “Apasionados”, al éxito del covers “te amo” se le sumaba “burbuja de amor”, “el amor de mi vida” y otra versión de “no se vivir sin tu amor”.

En el 2005 llegaba un sentimiento con el famoso “la cabaña”, “yo no te pido la luna”, “bachata rosa”, “y como es el”, para ese entonces era tal la explosión que se generó en Las Varillas que Pozo del Molle lo trae por primera vez con “Sr Frogs”, la banda luego se metió en una carnaval con un baile en Sportivo Pozo del Molle, allá por el año 2007, con un gran disco “Nuestro Tiempo”, Diego Granade, ya era una realidad consolidada, “el hotel”, “cuando baje la marea” lo metían de lleno en el contacto con la gente, antes de aquellos bailes la casa de la familia Petri, era anfitriona de los cantantes.

De allí en adelante volvieron una y otra vez, el último show en Pozo del Molle fue en el año 2013, los muchachos comieron en la terminal de la mano del Ale Ferrero y luego fueron al boliche “Vancouver” que recibió por primera vez a Pablo Tamagnini, recientemente incorporado a la banda, Tamagnini también pasó como solista en un verano de “Av Nova” y le había disputado la noche a un “Fénix” que quería imponerse en la noche, pero no podía ante un boliche que quedó en la historia de Las Varillas y la zona.

No fue el primer baile en la zona, pero si el primero de Las Varillas, el del pasado 7 de octubre, no estuvieron las mesas, ni las sillas, la gente llegó temprano, el show comenzó a las 0.45 y culminó cerca de las 4 am, un baile multitudinario, una puesta en escena diferente, un telón que cayó, pantallas gigante detrás y una puesta en escena que combina la modalidad nueva, los llamados híbridos, aquellos temas que la banda hizo con otros cantantes como colaboradores están, el video e imagen canta atrás y el artista en vivo, así forman el dueto.

El vestuario fue distinto, la presencia escénica es importante pero el vestuario está muy presente en esta nueva versión de “La Konga”, el inicio se da con temas del momento, Tamagnini inicia con el covers de Luck Ra, “te mentiría” y cierra con “el mismo aire” de Camilo.

La gente se comportó de buena manera, había jóvenes, hubo familia, gente que se reencontró después de mucho tiempo, gente que quiso volver por un rato a algo que no concurría hace mucho tiempo, realmente no hubo edad, no hubo clase social, solo hubo una misma misión en la noche, por una vez, se dejó el miedo, se eligió recibir una dosis, no habrá sido una vacuna, pero si fue una inyección anímica, fue el volver a reencontrarse con un ritual, que incluso hasta el menos creyente, cuando se fue a dormir, estoy seguro que se arrodillo y dio gracias de poder haber vuelto al menos por un rato, a una normalidad que hace unos meses no existía.